La resistencia farmacológica, en particular a fármacos citotóxicos, por lo general ocurre por múltiples mecanismos, en dos de los cuales participan transportadores de membrana.
La disminución en la captación de fármacos como los antagonistas de folatos, análogos de nucleósidos y complejos de platino son mediados por disminución en la expresión de los transportadores de entrada necesarios para que estos fármacos penetren al tumor.
El incremento de la salida de los fármacos hidrófobos es uno de los mecanismos encontrados más a menudo de resistencia antitumoral en estudios celulares de resistencia. Por ejemplo, la glucoproteína P es sobreexpresada en células tumorales tras la exposición a los fármacos antineoplásicos citotóxicos (Lin y Yamazaki, 2003; Leslie et al., 2005; Szakacs et al., 2006).
La glucoproteína P expulsa a los fármacos anticancerosos, con lo que confiere a las células resistencia a sus efectos citotóxicos. Otros transportadores, como la proteína de resistencia al cáncer mamario (BCRP, breast cancer resistance protein), y las proteínas relacionadas con resistencia a múltiples fármacos (MRP, multidrug-resistance associated protein) también se han implicado en la resistencia a los fármacos antineoplásicos (Clarke et al., 2002; Toyoda et al.,2008). La sobreexpresión de la proteína 4 de resistencia a múltiples fármacos (MRP4, multidrug-resistance protein 4) se acompaña de resistencia a los análogos de los nucleósidos antivirales (Imaoka et al., 2006; Schuetz et al., 1999).